El rincon de la poesia
Bienvenidos a la nueva sección del blog de SisterBoy “El rincón de la poesía” también conocida como “no tengo tiempo de actualizar como Dios manda y no quiero que pase mucho tiempo sin poner algo para no perder lectores”
A mí la poesía no me gusta mucho, de hecho estoy en contra del concepto mismo de poesía, o más bien, del concepto de rima. Siempre me ha parecido un poco absurdo imaginar a un tipo sentado frente a un papel pensando palabras que rimen con violeta (¿bicicleta? ¿maceta? ¿redondeta? ¿teta?).
Desde luego en este empeño por buscar la rima hay esfuerzos más loables que otros, por ejemplo no es lo mismo escribir unos versos como “Del salón en el ángulo oscuro, de su dueña tal vez olvidada, silenciosa y cubierta de polvo, veíase el arpa” que otros como “no hay marcha en Nueva York y los jamones no son de York”.
Quizás el arte de la poesía tenga que ver precisamente con eso, es decir, conseguir unos versos rimados sin que se note que has hecho un ridículo esfuerzo de imaginación para conseguir que las cosas encajen (“sobre Mario de bruces, tres cruces”).
Vamos que yo prefiero la prosa o incluso la poesía traducida de otros idiomas donde evidentemente se elimina este problema.
El poema que inaugura la sección es de Cesar Vallejo, siempre me ha gustado mucho.
Un hombre pasa con un pan al hombro...
Un hombre pasa con un pan al hombro
¿Voy a escribir, después, sobre mi doble?
Otro se sienta, rascase, extrae un piojo de la axila, mátalo
¿Con qué valor hablar del psicoanálisis?
Otro ha entrado a mi pecho con un palo en la mano
¿Hablar luego de Sócrates al médico?
Un cojo pasa dando el brazo a un niño
¿Voy, después, a leer a André Bretón?
Otro tiembla de frío, tose, escupe sangre
¿Cabrá aludir jamás al Yo profundo?
Otro busca en el fango huesos, cáscaras
¿Cómo escribir, después, del infinito?
Un albañil cae de un techo, muere y ya no almuerza
¿Innovar, luego, el tropo, la metáfora?
Un comerciante roba un gramo en el peso a un cliente
¿Hablar, después, de cuarta dimensión?
Un banquero falsea su balance
¿Con qué cara llorar en el teatro?
Un paria duerme con el pie a la espalda
¿Hablar, después, a nadie de Picasso?
Alguien va en un entierro sollozando
¿Cómo luego ingresar a la Academia?
Alguien limpia un fusil en su cocina
¿Con qué valor hablar del más allá?
Alguien pasa contando con sus dedos
¿Cómo hablar del no-yo sin dar un grito?
A mí la poesía no me gusta mucho, de hecho estoy en contra del concepto mismo de poesía, o más bien, del concepto de rima. Siempre me ha parecido un poco absurdo imaginar a un tipo sentado frente a un papel pensando palabras que rimen con violeta (¿bicicleta? ¿maceta? ¿redondeta? ¿teta?).
Desde luego en este empeño por buscar la rima hay esfuerzos más loables que otros, por ejemplo no es lo mismo escribir unos versos como “Del salón en el ángulo oscuro, de su dueña tal vez olvidada, silenciosa y cubierta de polvo, veíase el arpa” que otros como “no hay marcha en Nueva York y los jamones no son de York”.
Quizás el arte de la poesía tenga que ver precisamente con eso, es decir, conseguir unos versos rimados sin que se note que has hecho un ridículo esfuerzo de imaginación para conseguir que las cosas encajen (“sobre Mario de bruces, tres cruces”).
Vamos que yo prefiero la prosa o incluso la poesía traducida de otros idiomas donde evidentemente se elimina este problema.
El poema que inaugura la sección es de Cesar Vallejo, siempre me ha gustado mucho.
Un hombre pasa con un pan al hombro...
Un hombre pasa con un pan al hombro
¿Voy a escribir, después, sobre mi doble?
Otro se sienta, rascase, extrae un piojo de la axila, mátalo
¿Con qué valor hablar del psicoanálisis?
Otro ha entrado a mi pecho con un palo en la mano
¿Hablar luego de Sócrates al médico?
Un cojo pasa dando el brazo a un niño
¿Voy, después, a leer a André Bretón?
Otro tiembla de frío, tose, escupe sangre
¿Cabrá aludir jamás al Yo profundo?
Otro busca en el fango huesos, cáscaras
¿Cómo escribir, después, del infinito?
Un albañil cae de un techo, muere y ya no almuerza
¿Innovar, luego, el tropo, la metáfora?
Un comerciante roba un gramo en el peso a un cliente
¿Hablar, después, de cuarta dimensión?
Un banquero falsea su balance
¿Con qué cara llorar en el teatro?
Un paria duerme con el pie a la espalda
¿Hablar, después, a nadie de Picasso?
Alguien va en un entierro sollozando
¿Cómo luego ingresar a la Academia?
Alguien limpia un fusil en su cocina
¿Con qué valor hablar del más allá?
Alguien pasa contando con sus dedos
¿Cómo hablar del no-yo sin dar un grito?
posted by SisterBoy at 10:02 AM
8 Comments:
Opino como tú sobre la poesía en general. No es un arte que me llegue especialmente y cuando alguna vez intenté hacer mis pinitos, alguien debería haberme cortado luego las manos por ello.
Puestos a elegir rimas, me quedo con las de Mecano. A más tontas, más grandes. Véase:
En "Cruz de Navajas": No hay más que un somier, taciturno que usar por turnos...
Dos drogadictos en plena ansiedad, roban y matan a Mario Postigo, mientras su esposa es testigo...
En "El blues del esclavo": No hay un Espartaco, que entre a saco...
En "Eugenio Salvador Dali": Dali se decolora, porque esta lavadora...
Y mil ejemplos más. Sublimes. Vamos, ni Rimbaud y Neruda trabajando codo con codo habrían superado a los hermanos Cano.
Que jeta tenian los Cano :) Escucha este poema
Tic tac tic tac tic toc
Oigo el sonido del viejo reloj
Labrado en madera de boj
Me gusta más que un cuento de Chejov
Esto lo canta Ana Torroja y arrasa en Venezuela
Mi favorita es en "Ay Dalai":
En stero en este monasterio...
Claro que también me gusta mucho en "La Fuerza del destino" eso tan bonito de: "te dije nena dame un beso/tú contestasteS que no"
Pensaba destacar alguna estrofa de El hijo de la luna pero es imposible destacar nada, hay que ponerla toda
tonto el que no entienda
cuenta una leyenda
que una hembra gitana
conjuró a la luna hasta el amanecer
llorando pedía
al llegar el día
desposar un calé
tendrás a tu hombre piel morena
desde el cielo habló la luna llena
pero a cambio quiero
el hijo primero
que le engendres a él
que quien su hijo inmola
para no estar sola
poco le iba a querer
estribillo
luna quieres ser madre
y no encuentras querer
que te haga mujer
dime luna de plata
que pretendes hacer
con un niño de piel
hijo de la luna
de padre canela nació un niño
blanco como el lomo de un armiño
con los ojos grises
en vez de aceituna
niño albino de luna
maldita su estampa
este hijo es de un payo
y yo no me lo callo
estribillo
gitano al creerse deshonrado
se fue a su mujer cuchillo en mano
¿ de quién es el hijo?
me has engañao fijo
y de muerte la hirió
luego se hizo al monte
con el niño en brazos
y allí le abandonó
estribillo
y las noches que haya luna llena
será porque el niño esté de buenas
y si el niño llora
menguará la luna
para hacerle una cuna
y si el niño llora
menguará la luna
para hacerle una cuna.
Esta sí que es buena
Entre el cielo y el suelo hay algo
con tendencia a quedarse calvo
de tanto recordar.
Y ese algo que soy yo mismo
es un cuadro de bifrontismo
que sólo da una faz.
La cara vista es un anuncio de signal.
La cara oculta es la resulta
de mi idea genial de echarte.
Me cuesta tanto olvidarte.
Bienvenido/a Zar-polosco.
Jejeje pues mira que Entre el cielo y el suelo era una de las que salvaba quizás porque le tengo un cariño especial (era la canción favorita de mi novia en el instituto)
Metiéndome donde no me llaman y sin ánimo de ser entrometido, aparte de tu rincón de la poesía podías crear otro rincón sobre letras de canciones para comentarlas. Las sandeces grandilocuentes de los Héroes del Silencio, las letras tan lógicas y contundentes de Camela, cuales eran las verdaderas intenciones del Dúo Dinámico cuando decían quisiera ser aurora boreal, si es verdad, como decía Raphael en Digan lo que digan, que más dicha que dolor hay en el mundo. En fin. Hay tema para grandes controversias.
Bueno es una larga tradición esa de comentar las letras de las canciones, el analisis de "La barbacoa" de Georgie Dann es un clásico, igual que
se ha hecho con muchas canciones de Jose Luis Perales
¿Por qué pregunta "a que dedica el tiempo libre" cuando está claro que lo dedica a ponerle los cuernos?
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