Orgasm Addict
Hablamos de “Asfixia” película basada en un libro de Chuck Palahniuk, el penúltimo (a estas alturas posiblemente ya antepenúltimo) enfant terrible de la literatura norteamericana. Dirige Clark Gregg un no demasiado conocido actor secundario y novato en las labores de realización.
Es la historia de Vincent Mancini un empleado de un parque temático histórico que redondea sus ingresos simulando atragantarse en restaurantes públicos para provocar que algún buen samaritano practica su destreza con la maniobra de Hemlich y se sienta tan realizado que se dedique a mantener al chico. Yo tampoco lo entiendo. Tampoco se entiende demasiado bien el vinculo del protagonista con su madre, una mujer enferma de Alzheimer e internada en un caro hospital que Vincent sufraga con sus timos ni mucho menos la relación que Vincent establece con la doctora que la atiende.
Luego hay otras cosas que sí se entienden como las grotescas situaciones que se producen en el ridículo trabajo de Vincent (como se ha dicho trabaja en un parque temático haciendo de siervo irlandés del siglo XVIII) o su adicción al sexo (más bien sus consecuencias y sus paradojas que no su origen que tampoco explica bien) pero están narradas de una forma tan chapucera y torpe que es como si no se entendieran.
En resumen la película se resiente de estar realizada, como se ha dicho, por un novato que no sólo dirige su primera película sino que también firma con este su segundo guión (el primero fue “Lo que la verdad esconde” que era, por otro lado, una película con un guión nefasto).
Ignoro cual es el grado de fidelidad de la película al libro ya que no he leído este último (aunque confieso que ahora tengo curiosidad por hacerlo) pero, y esto tendrá que confirmarlo alguien que conozca el libro y la película, me parece un claro caso de mala adaptación donde se cometen los habituales errores de dar por conocidas previamente por el espectador algunas de las claves de la historia, evitar eliminar argumentos o situaciones anticinematográficas para que el lector del libro no se sienta defraudado o pretender que algo que funciona sobre el papel tiene que funcionar también en pantalla grande simplemente poniéndole imágenes a un texto. Por poner un ejemplo las reflexiones con las que Vincent explica su escepticismo sobre los efectos positivos de la terapia que esta siguiendo contra su adicción puede que resulten brillantes en el original literario pero en el cine resultan inferiores, por poner un ejemplo, a un monologo de veinte segundos de un capitulo de Nip Tuck donde el Doctor Troy le explica a Gina exactamente lo mismo.
Tras un comienzo francamente funesto, en el que no se puede presentar peor una historia y sus personajes, la película se asienta un poco y resulta más soportable e incluso tiene algunos momentos buenos (aunque desaprovechados) deudores -posiblemente- del original literario y –con toda seguridad- de los actores que la interpretan entre los que se encuentran Sam Rockwell (el inolvidable Wild Bill de “La milla verde”), Anjelica Houston y Kelly Macdonald.
Una ultima advertencia. Si deciden ir a verla hagan lo posible por que sea en una sesión en versión original porque el doblaje perjudica muchísimo esta película.
6 Comments:
Pocas ganas me quedan de ir a verlaXD
Tampoco despierta mi interés. Sin pretender ser repelente, según la imdb se llama Victor y no Vincent ;)
Seguramente estaba pensando yo en Vincente Minelli, no sé por qué. Gracias por la correción :)
Pues ya debe ser malo el doblaje para perjudicar la película.
El doblaje nunca beneficia una pelicula y muchas veces la perjudica. A lo más que se puede a aspirar es a que no la estropee mucho.
And the winner is... Sisterboy!
Pasa a recoger el premio:
http://quieroserjuez.blogspot.com/2008/11/premiada.html
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