UNA PIEZA INACABADA PARA PIANO MECÁNICO.
Sin spoilers.
Giuseppe Tornatore hizo en 1988 una película que vio todo el
mundo y posteriormente prosiguió su carrera haciendo muchas otras películas que
no ha visto nadie o que al menos no han dejado tanto recuerdo como aquel
“Cinema Paradiso” (película que por cierto considero que no resiste un segundo
visionado).
Una buena crítica de Carlos Boyero en “El País” (al margen
de la ausencia de alternativas en la asolada cartelera veraniega y de una serie
de rocambolescas aventuras extra cinematográficas) me llevó a ver esta película
pese a que considero al cara-crater mi anticrítico particular, pero leyendo de
forma lateral dicha crítica encontré en ella un tono bastante alejado del
empalagoso y millan-astrayanesco habitual así que decidí darle un chance a la
película. Tras verla no obstante la considero un ejemplo preclaro de talento
insuficiente tanto en el guión como en la dirección. Intentemos explicar por
qué.
“La mejor oferta” es la historia de Virgil Oldman (Geoffrey
Rush), solitario y maniático anticuario (su misantropía le impide incluso tocar
nada ni a nadie si no tiene puestos sus sempiternos guantes) que ha decidido
sustituir el contacto humano por el de los objetos. Cierto día Oldman recibe la
llamada de una mujer que insiste en que dirija la tasación y subasta de una
casa antigua que acaba de heredar, un encargo insólito que además contiene el
misterio agregado de que la mujer se niega a mostrarse ante el hombre del que
suplica su ayuda.
La película tiene un arranque ágil e interesante, pero a
medida que la trama avanza se empiezan a notar bastantes defectos como el de
una mala planificación de las escenas (discontinuas, de duración excesiva y en
ocasiones incluso redundantes) y unas interpretaciones bastante desatadas
(incluyendo al gran Geoffrey Rush que parece aquí un cruce entre lo más
histriónico de David Helfgott y el Capitán Barbossa por no hablar del horrible
Jim Sturgess capaz de joder cualquier producto en el que aparezca su cara de
memo). No obstante hay que reconocer que el interés se mantiene durante un buen
rato en base a la simple y pura intriga por saber qué es lo que de verdad se
oculta tras la indescifrable trama, sin embargo a medida que esta empieza por
fin a desvelarse se muestra al final como algo demasiado enrevesado y absurdo
como para ser tenido en cuenta. Y no es que la historia del cine no esté llena
de argumentos a los que se podría objetar lo mismo (posiblemente todos ellos),
por ejemplo en “Vértigo” (que menciono porque algunas críticas han establecido
comparaciones entre ambos filmes), pero el secreto está precisamente en
transformar, por medio del talento cinematográfico, dichos argumentos
intragables en algo que logre en el espectador eso que se conoce como
“suspensión de la incredulidad”, pero si a una historia inverosímil se le une
una labor de guión y realización (dos trabajos que en este caso son
desempeñados por la misma persona) defectuoso el resultado es una película que
interesa a ratos pero que al final hay que tirar al cubo de basura de la
memoria. Destaca no obstante un hermoso epílogo que hubiera merecido más suerte
que el hecho de estar acompañada de más de dos largas horas de
despropósito.
.
8 Comments:
Coincido en la valoración general de la película, dura demasiado, hay escenas mal resueltas y la solución es de lo más simplona. Sin embargo, yo soy un poco más benévolo, la película me gustó en general y no la consideraría un “despropósito” más bien una película “fallida”.
Por cierto, ¿has visto “Trance”? a mi me gustó mucho más y esa sí que es inverosímil y con giros en los giros de los giros.
Un saludo.
Tendré qeu esperar a que esté disponible en el mercado secundario, ya me arrepentí de ver "La mejor oferta" doblada y creo que con Trance sería peor .
Bien, te haremos caso y no iremos a verla. Y ahora, cuéntanos la serie de rocambolescas aventuras extracinematográficas. Por favor.
Eso lo guardo para mis memorias
Trance está disponible en calidad óptima. Se deja ver pero creo que mañana no me acodaré más que del ejem de Rosario Dawson. No digo más que es spoiler...
tampoco la música es bonita? ya está mayor Enio Morricone? es una de las cosas que mas recuerdo de Cinema Paradiso.
La música está bien aunque Ennio como John Williams, ya hace tiempo que se ha aburguesado y acomodado. Cualquiera no.
Ayer mismo estuve escuchando a Morricone en el Spotify. Sus clásicos y un par de discos con la etiqueta lounge o algo así. Ya es casualidad. Y, desde luego, Morricone se ha ganado la comodidad y el aburguesamiento.
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