Final de temporada
De temporada de películas Oscars lo que quiere decir que ahora estaremos otro año sin ir al cine más que una vez cada quince días lo que en el fondo agradezco porque esta ridicula carrera de a-ver-cuantas-veo-antes-de-la-ceremonia ya me tenía cansado.
Se comenta "Slumdog Milloinaire" de forma un poco más extensa (es obligado teniendo en cuenta su incomprensible éxito en la ceremonia) y luego "El curioso caso de Benjamin Button" y "The Wrestler" de forma más reducida porque, por razones diversas, no hay necesidad de hablar mucho de ellas. Spoilers en la primera y cuasi spoilers en las otras dos
1. BOMBAY-LOS ANGELES

Está claro que Slumdog Millonaire será recordada no como una gran película sino como una gran historia que empieza precisamente cuando termina su rodaje. Estoy convencido de que en el futuro (suponiendo que tal futuro exista para este producto) se hablará de las dificultades de su rodaje, de los actores no profesionales que intervienen en ella, de cómo se iba a distribuir directamente a DVD hasta que una productora la rescató, de cómo poco a poco y sin razón lógica que lo explique se fue convirtiendo en la gran sorpresa de este año en la gala de los Oscars obteniendo al final OCHO estatuillas (dejando con un palmo de narices a la cara producción que hasta ese momento era la gran favorita), de cómo una película en principio repudiada en la India se ha convertido, tras su éxito, en un motivo de gloria nacional, se hablará de la simpática troupe de actores jóvenes y cantantes y guionistas bajitos vestidos de negro y de la festiva e insólita celebración colectiva del último y definitivo Oscar con la que fue premiada.
En definitiva que Slumdog Millonaire si es recordada dentro de dos años lo será por lo que pasó antes y después de la película y no por lo que tiene lugar durante la proyección de la misma.
¿Significa eso que Slumdog Millonaire es una mala película? Pues no, no lo es, pero tampoco es nada del otro mundo aunque tampoco quiero entrar en la cuestión de si ha merecido o no tantos galardones, porque repasando la historia de los premios de la Academia podemos encontrarnos con muchísimos ejemplos de películas que arrasaron en la gala de tal o cual año siendo poco más que una mediocridad que ha sido rápidamente olvidada. Digamos que es casi una tradición que tal cosa suceda de vez en cuando.
Slumdog Millonaire parte de una idea bastante sugerente, el repaso de la accidentada biografía de un chico de los suburbios de Bombay a través de su participación en el concurso “¿Quieres ser millonario?”. Como si tratara de un sueño, una alucinación o una especie de juicio celestial (y de hecho durante buena parte del desarrollo de la historia llegué a pensar que se trataba precisamente de eso) cada una de las preguntas remite a un determinado momento clave en la vida de Jamal y es, apelando únicamente a su experiencia vital, como el muchacho logra superar cada una de las pruebas.
Como digo es una idea interesante sobre todo cuando uno no sabe muy bien a qué atenerse sobre cual es el verdadero sentido de lo que está viendo y también durante toda la parte inicial de la película donde el frecuentemente criticado “estilo videoclip” de Danny Boyle (la fotografía lechosa y de aspecto irreal, la banda sonora, el montaje fraccionado, los ángulos de cámara inverosímiles) despliega todas sus armas para describir la primera infancia de los protagonistas. En este segmento en concreto la película resulta bastante interesante y con un ritmo excelente (al que ayuda el estilo de Boyle anteriormente citado). Lo malo es que durante el desarrollo del resto del filme esa idea tan buena empieza a resultar cansina aparte de que en el momento en el que tono de la película se vuelve más realista uno empieza a darse cuenta de la tremenda estupidez que es todo el argumento.
Pero ni siquiera eso basta para estropear una película y de eso también hay abundantes ejemplos en la historia del cine. Sin ir más lejos se ha mencionado bastante (el propio Boyle lo ha hecho) el nombre de Frank Capra y sus cuentos de hadas modernos con final feliz como una de las influencias de Slumdog. Lo cierto es que Capra poseía la cualidad de convertir en sublimes unas historias que, en manos de cualquier otro director, hubieran resultado cursis y edulcoradas. Incluso parte de lo que ocurre en la cinta(sobre todo en su resolución final) me recordó también a una antigua película española, Historias de la Radio (uno de cuyos gags por cierto fue repetido de manera idéntica y seguramente casual en Radio Days de Woody Allen), dirigida por Jose Luis Saenz de Heredía.
El problema es que el desenlace de Slumdog Millonaire resulta bastante pobre e insatisfactorio y una película como esta requiere de un clímax que cierre de forma brillante todo lo bueno (o malo) visto hasta ese momento pero para eso se requiere de un talento especial del que Danny Boyle carece porque Danny Boyle siendo un director con películas bastante buenas no es desde luego Frank Capra. No es ni siquiera Jose Luis Saenz de Heredia.
Conclusión
a) Danny Boyle hace trampas
b) No es un genio
c) Ha tenido suerte
d)
Pero bueno, parece que a la gente le ha gustado y todo el mundo sale contento de la peli hablando de lo bonita que es la historia, y de cómo ha logrado triunfar a pesar de las adversidades y de la excelente banda sonora y de lo emocionante que es baile final de los protagonistas (aunque a mí me pareció mejor el de Zatoichi) y de lo monos que estaban los niños en la gala de los Oscars. Pues vale.
2. UN CORAZON CON FRENO Y MARCHA ATRÁS

Historia de un hombre que nace siendo -físicamente- un anciano y muere siendo un recién nacido sin que nadie se extrañe mucho por ello. He oído comparaciones entre el argumento de esta película y el de "Forrest Gump" pero no creo que sea así. Si tuviera que buscar una comparación lo haría con títulos como "Eleni" de Theo Angelopuolos o "Las armonias de Werckemeister" de Bela Tarr (y sé lo absurdo que puede parecer esto pero esa es la sensasción que tuve mientras veía la pelicula de Fincher) en el sentido de que las tres películas estan compuestas por un encadenamiento de escenas de una belleza y una maestría técnica insuperables, unas escenas puestas al servicio de un argumento oculto, críptico o simplemente ausente.
Este último caso me parece el de Benjamin Button (la llamaremos así para abreviar)en la que dicho argumento no pasa de ser una mera exposición de las paradojas que trae consigo el curioso ciclo evolutivo de su protagonista. Me refiero a que lo mismo daría narrar la historia de un hombre que se pasa toda su vida andando sobre las manos. Cualquier argumento sirve si de lo que se trata es de servir escenas tan elegantes como lal affaire de Benjamin en el hotel de Murmansk o la de la breve batalla con el submarino (modesta contribución del protagonista al esfuerzo de guerra y único acontecimiento histórico al que se hace referencia en la película lo que, como se verá, es una de las cosas que la aleja bastante de "Forrest Gump") o la escena de la danza en la que Daisy (Cate Blanchett) trata de seducir al viejo-niño, o la cadena de fatales casualidades que desemboca en el accidente que sufre la bailarina o para terminar todas las que muestran los últimos días del niño-viejo.
La visión de Benjamin Button no es una experiencia desagradable, todo lo contrario, aunque sí entiendo que muchos espectadores puedan encontrarla lenta aparte de que es inevitable que se note su larga duración. Yo calificaría dicha visión de hermosa aunque sin ninguna trascendencía, como uno de esos atardeceres que se ven en la película.
3. THE WRESTLER

Me ha parecido un peliculón. Me he metido completamente en la tragedia y me he implicado al máximo en la triste decadencia Randy "The Ram" y creo que es junto con "Frost/Nixon" lo mejor en lo que llevamos de año. El mérito más destacado de la película es presentar una historia completamente desprovista de los artificiosos dramáticos tradicionales (como esos de los que abusaba Sam Mendes en "Revolutionary Road") y que sin embargo consiga transmitir de una manera tan viva el dolor físico (hay una complacencia en la tortura de la carne de tintes casi Melgibsonianos) y moral en el que vive sumergido el protagonista.
De hecho curiosamente la película resulta más emotiva cuanto más se aparta de los momentos en teoría más propensos a dicha emotividad (la relación de Randy con su hija y con la bailarina a la que interpreta Marisa Tomei) y más se centra en la vida cotidiana del luchador mostrando a través de gestos sencillos su soledad y su marginación. La escena en la que Randy se estrena en su nuevo puesto de dependiente en la carniceria de un supermercado es sin duda la mejor que he visto en lo que llevamos de temporada.
En fin damos por cerrada pues la temporada de Oscars, a ver si la próxima vez hablamos de otra cosa que no sean películas aunque veo que mañana estrenan "Guerrilla".
Se comenta "Slumdog Milloinaire" de forma un poco más extensa (es obligado teniendo en cuenta su incomprensible éxito en la ceremonia) y luego "El curioso caso de Benjamin Button" y "The Wrestler" de forma más reducida porque, por razones diversas, no hay necesidad de hablar mucho de ellas. Spoilers en la primera y cuasi spoilers en las otras dos
1. BOMBAY-LOS ANGELES

Está claro que Slumdog Millonaire será recordada no como una gran película sino como una gran historia que empieza precisamente cuando termina su rodaje. Estoy convencido de que en el futuro (suponiendo que tal futuro exista para este producto) se hablará de las dificultades de su rodaje, de los actores no profesionales que intervienen en ella, de cómo se iba a distribuir directamente a DVD hasta que una productora la rescató, de cómo poco a poco y sin razón lógica que lo explique se fue convirtiendo en la gran sorpresa de este año en la gala de los Oscars obteniendo al final OCHO estatuillas (dejando con un palmo de narices a la cara producción que hasta ese momento era la gran favorita), de cómo una película en principio repudiada en la India se ha convertido, tras su éxito, en un motivo de gloria nacional, se hablará de la simpática troupe de actores jóvenes y cantantes y guionistas bajitos vestidos de negro y de la festiva e insólita celebración colectiva del último y definitivo Oscar con la que fue premiada.
En definitiva que Slumdog Millonaire si es recordada dentro de dos años lo será por lo que pasó antes y después de la película y no por lo que tiene lugar durante la proyección de la misma.
¿Significa eso que Slumdog Millonaire es una mala película? Pues no, no lo es, pero tampoco es nada del otro mundo aunque tampoco quiero entrar en la cuestión de si ha merecido o no tantos galardones, porque repasando la historia de los premios de la Academia podemos encontrarnos con muchísimos ejemplos de películas que arrasaron en la gala de tal o cual año siendo poco más que una mediocridad que ha sido rápidamente olvidada. Digamos que es casi una tradición que tal cosa suceda de vez en cuando.
Slumdog Millonaire parte de una idea bastante sugerente, el repaso de la accidentada biografía de un chico de los suburbios de Bombay a través de su participación en el concurso “¿Quieres ser millonario?”. Como si tratara de un sueño, una alucinación o una especie de juicio celestial (y de hecho durante buena parte del desarrollo de la historia llegué a pensar que se trataba precisamente de eso) cada una de las preguntas remite a un determinado momento clave en la vida de Jamal y es, apelando únicamente a su experiencia vital, como el muchacho logra superar cada una de las pruebas.
Como digo es una idea interesante sobre todo cuando uno no sabe muy bien a qué atenerse sobre cual es el verdadero sentido de lo que está viendo y también durante toda la parte inicial de la película donde el frecuentemente criticado “estilo videoclip” de Danny Boyle (la fotografía lechosa y de aspecto irreal, la banda sonora, el montaje fraccionado, los ángulos de cámara inverosímiles) despliega todas sus armas para describir la primera infancia de los protagonistas. En este segmento en concreto la película resulta bastante interesante y con un ritmo excelente (al que ayuda el estilo de Boyle anteriormente citado). Lo malo es que durante el desarrollo del resto del filme esa idea tan buena empieza a resultar cansina aparte de que en el momento en el que tono de la película se vuelve más realista uno empieza a darse cuenta de la tremenda estupidez que es todo el argumento.
Pero ni siquiera eso basta para estropear una película y de eso también hay abundantes ejemplos en la historia del cine. Sin ir más lejos se ha mencionado bastante (el propio Boyle lo ha hecho) el nombre de Frank Capra y sus cuentos de hadas modernos con final feliz como una de las influencias de Slumdog. Lo cierto es que Capra poseía la cualidad de convertir en sublimes unas historias que, en manos de cualquier otro director, hubieran resultado cursis y edulcoradas. Incluso parte de lo que ocurre en la cinta(sobre todo en su resolución final) me recordó también a una antigua película española, Historias de la Radio (uno de cuyos gags por cierto fue repetido de manera idéntica y seguramente casual en Radio Days de Woody Allen), dirigida por Jose Luis Saenz de Heredía.
El problema es que el desenlace de Slumdog Millonaire resulta bastante pobre e insatisfactorio y una película como esta requiere de un clímax que cierre de forma brillante todo lo bueno (o malo) visto hasta ese momento pero para eso se requiere de un talento especial del que Danny Boyle carece porque Danny Boyle siendo un director con películas bastante buenas no es desde luego Frank Capra. No es ni siquiera Jose Luis Saenz de Heredia.
Conclusión
a) Danny Boyle hace trampas
b) No es un genio
c) Ha tenido suerte
d)
Pero bueno, parece que a la gente le ha gustado y todo el mundo sale contento de la peli hablando de lo bonita que es la historia, y de cómo ha logrado triunfar a pesar de las adversidades y de la excelente banda sonora y de lo emocionante que es baile final de los protagonistas (aunque a mí me pareció mejor el de Zatoichi) y de lo monos que estaban los niños en la gala de los Oscars. Pues vale.
2. UN CORAZON CON FRENO Y MARCHA ATRÁS

Historia de un hombre que nace siendo -físicamente- un anciano y muere siendo un recién nacido sin que nadie se extrañe mucho por ello. He oído comparaciones entre el argumento de esta película y el de "Forrest Gump" pero no creo que sea así. Si tuviera que buscar una comparación lo haría con títulos como "Eleni" de Theo Angelopuolos o "Las armonias de Werckemeister" de Bela Tarr (y sé lo absurdo que puede parecer esto pero esa es la sensasción que tuve mientras veía la pelicula de Fincher) en el sentido de que las tres películas estan compuestas por un encadenamiento de escenas de una belleza y una maestría técnica insuperables, unas escenas puestas al servicio de un argumento oculto, críptico o simplemente ausente.
Este último caso me parece el de Benjamin Button (la llamaremos así para abreviar)en la que dicho argumento no pasa de ser una mera exposición de las paradojas que trae consigo el curioso ciclo evolutivo de su protagonista. Me refiero a que lo mismo daría narrar la historia de un hombre que se pasa toda su vida andando sobre las manos. Cualquier argumento sirve si de lo que se trata es de servir escenas tan elegantes como lal affaire de Benjamin en el hotel de Murmansk o la de la breve batalla con el submarino (modesta contribución del protagonista al esfuerzo de guerra y único acontecimiento histórico al que se hace referencia en la película lo que, como se verá, es una de las cosas que la aleja bastante de "Forrest Gump") o la escena de la danza en la que Daisy (Cate Blanchett) trata de seducir al viejo-niño, o la cadena de fatales casualidades que desemboca en el accidente que sufre la bailarina o para terminar todas las que muestran los últimos días del niño-viejo.
La visión de Benjamin Button no es una experiencia desagradable, todo lo contrario, aunque sí entiendo que muchos espectadores puedan encontrarla lenta aparte de que es inevitable que se note su larga duración. Yo calificaría dicha visión de hermosa aunque sin ninguna trascendencía, como uno de esos atardeceres que se ven en la película.
3. THE WRESTLER

Me ha parecido un peliculón. Me he metido completamente en la tragedia y me he implicado al máximo en la triste decadencia Randy "The Ram" y creo que es junto con "Frost/Nixon" lo mejor en lo que llevamos de año. El mérito más destacado de la película es presentar una historia completamente desprovista de los artificiosos dramáticos tradicionales (como esos de los que abusaba Sam Mendes en "Revolutionary Road") y que sin embargo consiga transmitir de una manera tan viva el dolor físico (hay una complacencia en la tortura de la carne de tintes casi Melgibsonianos) y moral en el que vive sumergido el protagonista.
De hecho curiosamente la película resulta más emotiva cuanto más se aparta de los momentos en teoría más propensos a dicha emotividad (la relación de Randy con su hija y con la bailarina a la que interpreta Marisa Tomei) y más se centra en la vida cotidiana del luchador mostrando a través de gestos sencillos su soledad y su marginación. La escena en la que Randy se estrena en su nuevo puesto de dependiente en la carniceria de un supermercado es sin duda la mejor que he visto en lo que llevamos de temporada.
En fin damos por cerrada pues la temporada de Oscars, a ver si la próxima vez hablamos de otra cosa que no sean películas aunque veo que mañana estrenan "Guerrilla".